A los gigantes de la tecnología les ha dado últimamente por vaticinar cómo será el futuro, como vimos con Intel y Nokia. Claro que todos lo hacen desde su propia perspectiva, que normalmente consiste en predecir que sus ideas, tecnologías y productos triunfarán como nunca. Ése es exactamente el espíritu que se refleja en la serie de artículos titulada “Google dentro de 10 años”, publicados en el blog oficial de Google.
Diez altos cargos de Google han elaborado diez artículos sobre el futuro a diez años vista, con motivo del décimo aniversario de la compañía. La verdad es que les ha quedado la mar de redondo el juego con el diez. Y todo para afirmar que durante la próxima década la tecnología multiplicará sus posibilidades por diez (esto lo añadimos nosotros para cerrar el círculo). Bromas aparte, los artículos recogen algunos datos muy llamativos.
Por ejemplo, el cofundador de YouTube, Chard Hurley, afirma en “The future of online video” que el popular portal recibe actualmente 13 horas de vídeo por minuto subidas por sus propios usuarios. Y la cifra irá en aumento, pues en unos años “el proceso de subida será tan sencillo como realizar una llamada de teléfono”, y el contenido estará además disponible en cualquier tipo de pantalla.
En otras palabras, curiosidades como la videocámara de JVC con subida directa a YouTube o los televisores con acceso directo a servicios de Google deberían ser algo de lo más normal de aquí a diez años. Y es que “en la próxima década cerca del 70% de la humanidad tendrá acceso fijo o móvil a Internet a velocidades cada vez más altas, de gigabits por segundo”, sentencia Vint Cerf, uno de los ‘padres’ de Internet, en su colaboración titulada “The next Internet”.
Entre las formas de acceso a la Red que crecerán de aquí en adelante, el más destacado es el teléfono móvil. Andy Rubin, ingeniero de Google, afirma en “The future of mobile” que “mientras que a los teléfonos fijos les costó 100 años llegar al 80% de todos los países del mundo, sus descendientes inalámbricos lo han hecho en 16 años”. Y se apoya en otras cifras: actualmente circulan 3.200 millones de móviles por el mundo, frente a 800 millones de coches y 1.400 millones de tarjetas de crédito.
gual recurre a estos datos para dejar claro por qué ha decidido Google meterse en el mercado de la telefonía con su sistema operativo Android. Rubin también destaca la inteligencia actual de los móviles. “El teléfono que tienes en tu bolsillo, mochila o cartera es probablemente diez veces más potente que el PC que tenías en tu escritorio hace 8 o 9 años”. Y la brecha se seguirá abriendo.
No sólo por la mejoras del hardware, indudablemente importantes, sino también por las del software. Rubin se refiere a las vueltas de tuerca que hoy en día podemos darle a las funciones de nuestro móvil, tanto actualizando su firmware como descargando aplicaciones desarrolladas por terceros. “Actualmente, tu teléfono mejora con el tiempo sin que muevas un dedo”. Esto está dando lugar a lo que Rubin llama “dispositivos a prueba de futuro”.
Y lo mismo puede aplicarse a la Red de redes. En palabras de Cerf, “Internet es esencialmente un artefacto de software (…), y el software no tiene fronteras”. Y precísamente en los últimos tiempos Google ha entrado de lleno en el desarrollo de software muy orientado a Internet, desde los programas de oficina de Google Docs hasta el reciente navegador Chrome, para muchos el primer tanteo de Google para acercarse a los sistemas operativos online que supuestamente se generalizarán en un futuro.
Por supuesto, no podían faltar artículos centrados en exclusiva en los dos grandes filones de negocio de Google: las búsquedas (de las que habla la vicepresidenta Marissa Mayer en “The future of search”) y la publicidad en Internet (tratada por otra de las vicepresidentas, Susan Wojcicki, en “Ad perfect”). Ambas parcelas mejorarán su funcionamiento a base de inteligencia artificial, en forma de dispositivos que entiendan lo que les pedimos como si hablásemos con una persona, saltándose incluso las inevitables barreras idiomáticas. Todo ello gracias a “la nube inteligente” (“The inteligent cloud”, artículo escrito a medias por el ingeniero Alfred Spector y el investigador científico Franz Och). Una metáfora que se refiere a todo ese conglomerado de datos e información generados tanto por personas como por máquinas, transmitidos a lo largo de todo el mundo por Internet para entender “cómo las personas y los sistemas piensan y reaccionan”.
En cualquier caso, los artículos son una niñería en comparación con el vídeo profético que os enseñamos hace cosa de una año. Lo que queda por ver es si a Google le pasará lo mismo que a Microsoft. Y nos explicamos: de todas las predicciones hechas por Bill Gates, destaca aquella de 1995 en la que afirmaba que los buscadores serían uno de los puntales de Internet. Y sin que nadie lo esperase, llegó Google con su buscador para acabar convirtiéndose en el máximo competidor de la compañía de las ventanas.
Ahora que Google afirma que “el teléfono móvil debe ser el producto de consumo más prolífico que jamás se haya inventado” y pronostica que será el dispositivo más importante de los próximos años, ¿surgirá un rival serio para Google de entre las empresas dedicadas a la telefonía móvil? ¿Alguna firma poco conocida que esté agazapada sin hacer mucho ruido y esperando su oportunidad? Sería la paradoja de las paradojas.